En este videoconsejo abordamos un nuevo efecto secundario cutáneo de los tratamientos oncológicos: el exantema maculopapular, una erupción y lesión cutánea que se manifiesta con cambios en el color, la textura y la apariencia de la piel.
Este tipo de erupción puede presentarse como:
Máculas: manchas rojas, marrones o negras, planas, sin relieve.
Pápulas: protuberancias sólidas sin líquido en su interior.
Maculopápulas: combinación de máculas y pápulas.
Las erupciones cutáneas son un efecto adverso frecuente en los tratamientos oncológicos:
Terapias dirigidas → 25 % a 50 % de incidencia.
Inmunoterapia → alrededor del 20 %.
En terapias dirigidas: rostro, cuero cabelludo, cuello, tronco, extremidades y parte superior de los brazos.
Aparece entre la segunda semana y la sexta-octava semana.
En inmunoterapia: principalmente tronco y extremidades.
Suele presentarse entre la tercera y sexta semana.
Además, puede acompañarse de picor, sequedad y, en ocasiones, ardor o inflamación tipo eczema.
El exantema maculopapular se clasifica según la extensión y los síntomas:
Grado 1 (leve): <10 % de la superficie corporal.
Grado 2 (moderada): 10 %–30 %, con impacto en actividades diarias.
Grado 3 (grave): >30 %, con afectación significativa de las actividades de la vida diaria.
El manejo depende de la severidad y del fármaco causante:
Leve: corticoides tópicos de baja potencia + antihistamínicos orales.
Moderado: corticoides tópicos de alta potencia, posible uso de corticoides orales.
Grave: corticoides orales, valorar la interrupción del tratamiento oncológico, sobre todo en inmunoterapia.
El cuidado complementario incluye:
Limpiadores syndet con pH fisiológico.
Emolientes para calmar y restaurar la función barrera.
Fotoprotector SPF50+, amplio espectro, sin perfume.
Agua termal en caso de prurito.
Evita la exposición solar.
Usa ropa suave y holgada de fibras naturales.
Mantén la piel hidratada con productos específicos para piel sensible.
Consulta al dermatólogo u oncólogo si la erupción no mejora o empeora.
Recuerda: pregunta siempre a tu farmacéutico de confianza.
Te aconsejaremos y resolveremos cualquier duda que tengas sobre el cuidado de la piel durante los tratamientos oncológicos.