En el videoconsejo de hoy vamos a abordar el contorno de ojos y las necesidades de cuidado específicas que requiere esta zona. Unos cuidados diferentes puesto que se trata de una piel que presenta unas características distintas a las del resto de la cara.

La piel aquí es hasta 10 veces más fina que la del resto del rostro, 0,3 – 0,5 mm, y tiene menos glándulas sebáceas, lo que la hace más propensa a la sequedad. Esta zona dispone de menos cantidad de colágeno y elastina, por lo que hay un menor soporte subcutáneo y tiene una red de vasos sanguíneos superficial, lo que la hace más propensa a que se vea pigmentada, es decir, ojeras y e hinchada o lo que es lo mismo, bolsas.
El parpadeo continuo y la gesticulación da lugar a arrugas dinámicas que, con el tiempo, se convertirán en estáticas, es decir, arrugas visibles incluso cuando el rostro está en reposo.
Los productos específicos para el contorno de ojos deben estar formulados con activos que ofrezcan eficacia, pero también es imprescindible una muy buena tolerancia por lo que deben estar testados dermatológica y oftalmológicamente.
Los activos que se incluyen en los productos para el contorno de ojos que han demostrado mayor efectividad y evidencia científica son:
Estimulan colágeno, mejoran arrugas y textura de la piel. Se debe empezar con retinoides en días alternos y aumentar la pauta según tolerancia y consejo farmacéutico
Favorecen la firmeza y la elasticidad de la piel.
Como por ejemplo la vitamina C, E y polifenoles que ayudan a neutralizar radicales libres y a unificar el tono de la piel.
Para disminuir bolsas de origen vascular o edematoso y mejorar la microcirculación, gracias a su efecto vasoconstrictor, antioxidante y drenante.
Para mantener la piel hidratada y confortable.
La elección del producto debe basarse en tus necesidades dermatológicas concretas: arrugas, ojeras, bolsas o deshidratación. El asesoramiento farmacéutico es clave para garantizar la elección de activos eficaces, bien tolerados y seguros para esta zona tan delicada.
Sea cual sea la necesidad, los productos para el contorno de ojos se aplican siempre sobre la piel limpia y seca. Utilizando una cantidad equivalente a un grano de arroz y aplicándola con un suave masaje sobre la zona, con los dedos corazón o anular para ejercer menos presión, desde el lagrimal hasta la sien. Se aplica en la parte inferior y también se debe aplicar en el hueso orbital superior, bajo la ceja, pero no directamente sobre el párpado móvil, salvo que el producto lo indique expresamente. Recomendamos aplicar este tipo de productos tanto en la rutina de día como en la rutina de noche.
Es también muy aconsejable utilizar gafas de sol homologadas para proteger la zona frente a las radiaciones solares, una de las principales causas de fotoenvejecimiento.
Recuerda, consulta siempre a tu farmacéutico de confianza, experto en dermofarmacia, te ayudaremos y resolveremos cualquier duda que tengas sobre el cuidado y la salud de tu piel.
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