Alrededor de 700 farmacias de Tailandia participan en una iniciativa para atender a las personas durante dos días después de que hayan dado positivo en la prueba de COVID-19. La Oficina Nacional de Seguridad Sanitaria paga a los farmacéuticos 700 THB (19,21 euros) por registrar a los pacientes para que sean aislados y atendidos en sus domicilios, ofrecerles asesoramiento y un paquete básico de medicamentos para el tratamiento de los síntomas, y por hacer un seguimiento para garantizar una respuesta rápida en caso de que alguno de ellos requiera hospitalización.