Los pacientes con una receta electrónica expedida en Estonia pueden ya obtener sus medicamentos en las farmacias comunitarias finlandesas. A la inversa (receta finlandesa teniendo validez en Estonia) ya era posible desde hace 18 meses, fecha desde la que se han alcanzado un total de 9.000 dispensaciones. Se prevé que el número de usuarios con recetas electrónicas estonias presentadas en Finlandia sea mayor. El proyecto ha costado 130.000 euros y se trata del punto de partida para prescripciones en formato digital en Europa.