Los farmacéuticos belgas han ampliado su oferta en materia de detección de COVID-19. A partir del 1 de noviembre, las personas sintomáticas (mayores de 6 años) que hayan presentado los síntomas característicos del COVID-19 (según la definición de Sciensano) durante un máximo de 5 días (según la definición de Sciensano) podrán realizarse una prueba rápida de antígenos en una farmacia. Estas pruebas serán gratuitas para todas las personas sintomáticas, ya que este nuevo servicio -al igual que las condiciones vigentes para los centros de pruebas y los consultorios médicos- será reembolsado en su totalidad. Además, los viajeros que regresen de un país o región de alto riesgo de infección también podrán hacerse la prueba de forma gratuita en las farmacias a partir del 1 de noviembre.