Un 5% de los accidentes de tráfico está relacionado con los medicamentos

Martes, 6 de abril de 2004.- El próximo 7 de abril se celebra el Día Mundial de la Salud 2004, en esta ocasión bajo el lema: La seguridad vial no es accidental . Durante este año, la Organización Mundial de la Salud centrará la atención en el problema de salud pública que constituyen los accidentes de tráfico. Los traumatismos por accidentes de tráfico son uno de los principales problemas de salud pública y se estima que, como consecuencia de los mismos, en el año 2002 fallecieron en todo el mundo 1,18 millones de personas. Estos datos se agravan en algunos países desarrollados, donde el problema es aún mayor. En España, por ejemplo, es la quinta causa de muerte, sólo por detrás de las enfermedades cardiovasculares, las neoplásicas, las respiratorias y las digestivas. En el año 2002, se registraron 5.347 víctimas mortales en nuestras carreteras.

El denominado “error humano” es el factor determinante del 75% de los accidentes y la ingestión de alcohol, drogas ilegales y algunos medicamentos, desempeñan en ellos un papel relevante. Al menos el 10% de los muertos o lesionados por accidentes de tráfico, habían tomado algún fármaco psicoactivo. La capacidad de conducción depende de una compleja integración de múltiples funciones, de carácter sensorial, cognitivo o motriz. Algunos problemas patológicos pueden interferir, en mayor o menor grado, en dicha capacidad, como sucede con la epilepsia y, en general, los trastornos convulsivos o los trastornos del sueño, entre otros. Ciertamente, no todas las patologías afectan igual. En general, el tipo de trastorno, el grado de control de la enfermedad y el cumplimiento del tratamiento son factores determinantes a la hora de determinar la peligrosidad al conducir.

Medicamentos

En España, en torno a un 5% de los accidentes, está relacionado con los medicamentos. Esto se ve agravado porque el 76,5% de los pacientes, afirma no haber recibido advertencias sobre el efecto de su medicación a la hora de conducir. En la Unión Europea, los fármacos con un mayor efecto negativo sobre la conducción son las benzodiazepinas , justo por detrás del alcohol (con una prevalencia del 7-14% y 41% de los casos, respectivamente). La prevalencia de la presencia de opiáceos oscila entre el 1 y el 4%.

Otros principios activos que se encuentran con frecuencia son antihistamínicos H1 , relajantes musculares y antidepresivos tricíclicos.

Los medicamentos pueden perjudicar a la conducción de muy diversas formas, bien porque produzcan un efecto terapéutico contraindicado en caso de manejar maquinaria peligrosa o conducir, o bien como consecuencia de un determinado efecto adverso. Los efectos que producen los medicamentos y que pueden afectar al conductor son entre otros, somnolencia, reducción de los reflejos, alteraciones oftalmológicas o de audición y estados de confusión y aturdimiento.

Para evitar los efectos asociados al consumo de medicamentos a la hora de conducir en primer lugar es esencial consultar al médico o farmacéutico y ser informado al respecto. Además, hay que evitar conducir al inicio de un tratamiento que potencialmente pueda disminuir reflejos o capacidad visual, y tener especial precaución a la hora de la indicación conjunta de varios medicamentos. De cualquier modo, cada caso será valorado individualmente, ya que un mismo medicamento puede afectar a una persona y a otra no, incluso podría afectar de forma distinta al mismo individuo en momentos diferentes.