En ocasiones, nuestro médico, tras el correspondiente diagnóstico, nos ha prescrito lo que conocemos como una Fórmula Magistral, que más tarde nos ha preparado y dispensado nuestro farmacéutico. Pero, ¿qué es una Fórmula Magistral?. La Ley de Garantías y Uso racional de los medicamentos define la Fórmula Magistral como "el medicamento destinado a un paciente individualizado, preparado por un farmacéutico, o bajo su dirección, para cumplimentar expresamente una prescripción facultativa detallada de los principios activos que incluye, según las normas de correcta elaboración y control de calidad establecidas al efecto, dispensado en oficina de farmacia o servicio farmacéutico”.
Según esta definición, la Fórmula Magistral debe prepararse por un farmacéutico o bajo su responsabilidad, siempre requiere receta médica, y se ha de preparar para un paciente concreto, identificado y, en consecuencia, no se puede preparar a gran escala. Esto quiere decir que se trata de un medicamento a todos los efectos. Por este motivo se le exigen las mismas pautas de calidad, seguridad y eficacia que han de superar las especialidades farmacéuticas industriales. La Fórmula Magistral por lo tanto es un medicamento hecho a la medida del paciente, en el que se ajustan las características del fármaco a las necesidades terapéuticas de una persona en concreto. Las fórmulas magistrales representan uno de los testimonios más representativos del origen de la profesión farmacéutica y constituye una de las actividades más arraigadas con la esencia de la actuación del farmacéutico. A pesar del auge de la fabricación industrial de los medicamentos, la práctica de la formulación magistral, sigue siendo indispensable en el tratamiento de casos específicos.
En resumen, recuerde que una fórmula magistral es un medicamento, y como tal se le exigen las mismas garantías de calidad, seguridad y eficacia. Además, debe ser prescrita por un médico y dispensada por un farmacéutico en una oficina de farmacia, acompañada de la debida información al usuario. Su principal característica es que se prepara a medida de un paciente en una situación concreta.
No lo olvide: pregunte siempre a su farmacéutico, él le informará sobre estas y otras cuestiones relacionadas con la salud y el medicamento.