El pleno del Parlamento Europeo fijó posición sobre la creación de un Espacio Europeo de Datos Sanitarios para facilitar el acceso a los mismos y garantizar que se compartan de manera segura.

El nuevo Espacio Europeo de Datos Sanitarios permitirá que los ciudadanos tengan el control de sus datos y también que se compartan de manera segura para fines de investigación y altruistas.

El informe aprobado por el pleno servirá de mandato negociador al Parlamento en las negociaciones con el Consejo sobre la forma final de la normativa.

Así, la norma dará acceso a los pacientes a sus datos sanitarios personales a través de los diferentes sistemas sanitarios de la UE, el denominado uso primario, y permitirá a los profesionales acceder a los datos de sus pacientes, estrictamente limitado a lo necesario para el tratamiento en cuestión. Esto cubrirá el historial médico, las recetas electrónicas, imágenes médicas y resultados de laboratorio.

En sus aportaciones, los eurodiputados quieren que los pacientes tengan más voz sobre cómo los proveedores de atención médica usan sus datos. Proponen un sistema de exclusión voluntaria para el uso secundario de la mayoría de los datos sanitarios y exigen que sea obligatorio contar con el consentimiento explícito del paciente para el uso secundario de ciertos datos sensibles (por ejemplo, información genética y genómica).