La migración cada vez más desproporcionada de trabajadores sanitarios dentro de la Unión Europea (UE) ha provocado una crisis de personal en varios Estados miembros, donde la escasez de personal pone en peligro la sostenibilidad de los sistemas sanitarios. Aunque el papel de la UE es limitado, las partes interesadas afirman que pueden encontrarse soluciones rápidas.
Según un informe de la Comisión de 2021, los sistemas sanitarios están bajo presión debido a la grave escasez de personal sanitario. En contra del impulso de la UE a la "convergencia al alza", el informe muestra una disparidad entre los Estados miembros. Por ejemplo, Rumanía y Polonia tienen menor densidad de médicos y enfermeras que Alemania y Suecia, lo que se explica en parte por la migración intracomunitaria.
Los críticos sugieren que todos los Estados miembros se enfrentan al mismo problema y pescan en el mismo estanque, con los países más ricos ganando la partida. "Rumanía, Italia, Grecia y todos los países del este de Europa son los más saqueados y empobrecidos por este proceso de despojo de mano de obra cualificada y cerebros brillantes", declaró a EURACTIV Gugliemo Trovato, director de comunicación de la Asociación Médica Europea.