El pasado 7 de noviembre los eurodiputados adoptaron sus recomendaciones sobre la priorización de la salud mental, como parte integral de la salud de las personas, en las políticas nacionales y de la Unión Europea (UE).

El informe, elaborado por la Subcomisión de Salud Pública, fue aprobado con 59 votos a favor, seis en contra y cuatro abstenciones. Los eurodiputados piden a la Comisión que elabore una estrategia de salud mental de la UE a largo plazo, global e integrada, basada en la reciente comunicación, y a los gobiernos nacionales que desarrollen las estrategias nacionales correspondientes con plazos claros, presupuestos adecuados, objetivos e indicadores concretos para supervisar los avances.

Los eurodiputados destacan que la salud mental y el bienestar están determinados por una combinación de factores socioeconómicos, medioambientales, biológicos y genéticos, y que cualquier persona, en cualquier momento de su vida, puede ser más susceptible a una peor salud mental. Se necesita un "enfoque de salud mental en todas las políticas" para prevenir, abordar y mitigar el impacto de las afecciones de salud mental, añaden.

El informe pide a los Estados miembros que prioricen y mejoren el acceso a los servicios de salud mental para los grupos vulnerables, como los niños, los adolescentes, los adultos jóvenes, las personas LGBTQIA+, los pacientes con enfermedades crónicas y discapacidades, las personas mayores, los migrantes y las minorías étnicas.

Dado que la salud mental sigue siendo estigmatizada y tabú, los eurodiputados subrayan que existe una necesidad urgente de desarrollar e implementar campañas de información, sensibilizar y promover debates abiertos sobre las condiciones de salud mental.

El llamamiento a la Comisión y a los gobiernos de la UE para que promuevan iniciativas para combatir el estigma, la exclusión y la discriminación de las personas con problemas de salud mental, con la participación de las comunidades, las personalidades públicas, los políticos, las instituciones públicas, los gobiernos y las personas con experiencia vivida.

Servicios

Los eurodiputados insisten en que todos los ciudadanos de la UE deben tener acceso a toda la gama de servicios de salud mental de calidad, sin dificultades financieras y administrativas. Destacan la necesidad de garantizar una mayor inversión en salud pública y abordar la escasez de personal de salud mental y la formación adecuada.

Otras recomendaciones clave incluyen:

  • Garantizar un espacio digital más seguro y saludable, para prevenir el odio y el ciberacoso en línea.
  • Abordar las desigualdades de género y la violencia contra las mujeres.
  • Medidas legislativas sobre la gestión de los riesgos psicosociales y el bienestar en el trabajo.
  • Recopilar y supervisar datos sobre salud mental, así como datos relacionados con el suicidio, y cartografiar la disponibilidad de servicios de salud mental en toda la UE.
  • Garantizar una financiación suficiente en futuros programas financieros como EU4Health y Horizonte Europa, así como una Misión sobre Salud Mental.
  • Designar el próximo año Año Europeo de la Salud Mental, de conformidad con la propuesta 9.1 de la Conferencia sobre el Futuro de Europa.