El Gobierno australiano anunció la introducción de la prescripción de 60 días para los medicamentos que tratan "afecciones estables y continuas". Será a partir del 1 de septiembre de 2023 cuando los médicos de cabecera australianos podrán realizar este tipo de prescripciones, que permitirán a los pacientes recoger en un solo acto de dispensación la medicación necesaria para dos meses de tratamiento por el precio de la medicación de un mes. Esta norma afectará a un total de 325 medicamentos y se estima que supondrá un ahorro de hasta 180$ por paciente al año. El coste de esta medida lo asumirá el sector farmacéutico siendo los farmacéuticos comunitarios los mayores afectados ya que, según sus estimaciones, un gran número de farmacias tendrá que cerrar, especialmente en las zonas rurales del país, produciendo un retroceso en la calidad asistencial.