Durante el primer año de funcionamiento de la Red de Farmacias Centinela de Euskadi se notificaron a la Unidad de Farmacovigilancia del País Vasco un total de 356 casos de sospechas de reacciones adversas a medicamentos (RAM). Así lo dio a conocer el pasado 7 de noviembre el Departamento de Salud del Gobierno Vasco, impulsor de esta iniciativa, en la que participan las farmacias comunitarias vascas. El proyecto se puso en marcha en 2024 con el objetivo de reforzar la vigilancia de la seguridad de los medicamentos.
Del total de 356 casos, 233 correspondían a mujeres y 187 a personas mayores de 65 años».
Los sistemas de farmacovigilancia tienen como objetivos principales la detección de reacciones adversas graves, desconocidas y de aquellas que se producen con fármacos sujetos a seguimiento adicional. Durante el periodo analizado, la red vasca notificó 104 casos graves (29,2 %), 52 casos (14,8 %) de asociaciones fármaco-RAM no descritas previamente y 16 casos relacionados con medicamentos de seguimiento adicional.
Del total de 356 casos, 233 (65,4 %) correspondían a mujeres y 187 (52,5 %) a personas mayores de 65 años. Por territorios, 218 procedían de Gipuzkoa, 90 de Bizkaia y 48 de Araba.
Los trastornos más frecuentes fueron los gastrointestinales, los del sistema nervioso y los generales o locales. En total, se identificaron 405 fármacos sospechosos implicados en las reacciones adversas a medicamentos, la mayoría pertenecientes a las categorías ATC de fármacos del sistema nervioso, del sistema cardiovascular y del sistema digestivo y metabolismo.
Amplia cobertura
La Red Centinela de Euskadi cuenta con 45 farmacias distribuidas por todo el territorio: 22 en Bizkaia, 15 en Gipuzkoa y 8 en Araba. Durante el mes de octubre se incorporarán nuevas farmacias a la red en los tres territorios, tras la formación impartida por el personal de la Unidad de Farmacovigilancia. Esta ampliación responde a los resultados positivos obtenidos y a la necesidad de consolidar y fortalecer la red.
45 farmacias de toda Euskadi integran esta iniciativa, cuyo objetivo fundamental es reforzar la vigilancia de la seguridad de los medicamentos».
La farmacia comunitaria constituye un centro de atención cercano al paciente, con personal experto en medicamentos y en su uso. Por este motivo, el Departamento de Salud del Gobierno Vasco ha promovido la creación de un modelo vasco de farmacia comunitaria integrado en los sistemas sanitarios, en el que los y las profesionales de farmacia desempeñan un papel fundamental en la gestión de la terapia farmacológica, el apoyo a la adherencia y las intervenciones sanitarias preventivas.
