Nº430
Numerosas evidencias apuntan a la eficacia y seguridad contrastadas de las espumas medicamentosas formuladas magistralmente en el tratamiento tópico –en piel y mucosas– de diversas patologías. Además de las clásicamente conocidas fórmulas con minoxidilo y dutasterida para el tratamiento de las alopecias, se emplean espumas con una gran variedad de principios activos para el tratamiento de otras afecciones con sintomatología cutánea, como la psoriasis, la dermatitis seborreica o la pitiriasis del cuero cabelludo, el acné o la hiperhidrosis.
Los adecuados periodos de estabilidad, la facilidad de aplicación y, con ello, la facilitación de la adherencia y el