Nº486
Existen múltiples clasificaciones de las fracturas óseas. En general, podemos considerar que son producidas por un mecanismo directo –trauma o golpe sobre la región fracturada– o bien por un mecanismo indirecto, esto es, fuerzas de compresión, de cizallamiento, de tracción o de torsión aplicadas sobre la zona ósea que superan la capacidad elástica del propio hueso desencadenando una fractura. Las de peor pronóstico son las fractura-luxación, ya que suelen implicar la lesión importante des estructuras adyacentes (fascias, músculos, ligamentos y vasos).
En los niños las epifisiolisis son las lesiones más peligrosas ya que pueden afectar al cartíla