Monodosis

Un decálogo de medidas dietéticas cardiosaludables

Publicado en Nº448 Nº448

La Asociación Americana del Corazón (AHA, por sus siglas en inglés) acaba de hacer pública una nueva declaración sobre la dieta y la salud cardiaca en la que, en base a la revisión actualizada de la evidencia científica, presenta 10 características claves de un patrón de alimentación cardiosaludable, que puede contribuir a una disminución del riesgo de diversas enfermedades cardiovasculares en todas las etapas de la vida. Esto se revela como una medida fundamental de promoción de la salud, pues está sólidamente demostrado que la mala calidad de la dieta, por otra parte, se relaciona de forma estrecha con un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares y muerte. Dicho de otro modo: la implantación de la profilaxis cardiovascular a través de la dieta es importante desde la infancia hasta la edad adulta para reducir el riesgo de desarrollar niveles elevados de colesterol “malo”, hipertensión, obesidad, diabetes tipo 2 y síndrome metabólico.

Partiendo de la idea de que los hábitos alimentarios pueden adaptarse a las preferencias personales, los estilos de vida, las prácticas étnicas y religiosas, y las etapas de la vida de las personas, se establecen las siguientes características de la dieta para promover una buena salud cardiaca: 

  1. Equilibre la ingesta de alimentos y calorías con actividad física para mantener un peso saludable.
  2. Elija y coma una amplia variedad y una gran cantidad de frutas y verduras para obtener una gran diversidad de nutrientes de alimentos en lugar de suplementos.
  3. Elija granos integrales y otros alimentos que se compongan principalmente de granos integrales.
  4. Incluya fuentes saludables de proteínas magras o de alto contenido de fibra, como proteínas vegetales (frutos secos y legumbres), pescados o mariscos, lácteos bajos en grasa o sin grasa, y cortes de carne magra, y limite las carnes rojas y procesadas.
  5. Utilice aceites vegetales líquidos no tropicales, como aceites de oliva o girasol.
  6. Siempre que sea posible, elija alimentos procesados en la mínima medida en lugar de alimentos altamente procesados. Entre los alimentos procesados se incluyen carnes conservadas mediante ahumado, curado o adición de conservantes químicos, y alimentos a base de plantas que tienen sal, azúcar o grasas añadidas. Los alimentos altamente procesados son aquellos que, más allá de la sal, azúcares o grasas añadidas, también incluyen colorantes, saborizantes y conservantes artificiales.
  7. Reduzca al mínimo el consumo de bebidas y alimentos con azúcares añadidos.
  8. Elija o prepare alimentos con poca sal o sin sal.
  9. Limite el consumo de alcohol; si no bebe, no comience a hacerlo.
  10. Aplique esta guía sin importar dónde se preparen o consuman alimentos. Los expertos subrayan la relevancia de adherirse a estas recomendaciones dietéticas con independencia de si los alimentos se preparan en casa, se piden en un restaurante o se compran preparados.

Es la primera vez que la AHA resume las evidencias que abordan la sostenibilidad y destaca que los patrones de alimentación cardiosaludable son también buenos para el medioambiente. Además, enumeran varios desafíos, incluidos los factores sociales que hacen más difícil adoptar o mantener estos patrones (entre otros, la desinformación generalizada en internet, la falta de educación nutricional en enseñanza primaria o el marketing específico de alimentos y bebidas poco saludables), y sugiere medidas de salud pública para abordar estos desafíos, tales como la introducción temprana de la educación sobre alimentación y nutrición en todos los niveles escolares.

Bibliografía

    • Lichtenstein AH, Appel LJ, Vadiveloo M, Hu FB, Kris-Etherton PM, Rebholz  et al. 2021 Dietary Guidance to Improve Cardiovascular Health: A Scientific Statement From the American Heart Association. Circulation. 2021; 144. DOI: https://doi.org/10.1161/CIR.0000000000001031.

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