Nº397
Uno de los objetivos globales para las enfermedades no transmisibles es detener, en 2025, el aumento de la prevalencia en adultos de la diabetes, manteniéndola en sus niveles de 2010. Con el fin de conocer cuál es la situación actual, se ha llevado a cabo un análisis global de 741 estudios epidemiológicos, incluyendo a 4,4 millones de participantes, que ha calculado las tendencias mundiales de la diabetes, la probabilidad que tiene cada país de alcanzar el objetivo global, y cómo los cambios en la prevalencia, junto con el crecimiento demográfico y el envejecimiento, están afectando al número de adultos con diabetes.
Lamentablemente, las conclusiones de este estudio son desalentadoras: la prevalencia estandarizada por edad de la diabetes en los adultos ha aumentado desde 1980 o, en el mejor de los casos, se ha mantenido sin cambios, en todos los países. Junto con el crecimiento demográfico y el envejecimiento, este aumento ha llevado a una cuadruplicación del número de adultos con diabetes en todo el mundo. La carga de la diabetes, tanto en términos de prevalencia como de número de adultos afectados, ha aumentado más rápidamente en los países de ingresos bajos y medianos que en los de ingresos altos.
Para llegar a estas conclusiones, se agruparon los datos de los estudios poblacionales en los que se habían recogido datos sobre la diabetes a través de la medición de sus biomarcadores. Se utilizó un modelo jerárquico bayesiano para estimar las tendencias de prevalencia de diabetes definida como una concentración de glucosa en plasma en ayunas de 7,0 mmol/L o más, el historial del diagnóstico de la diabetes o el uso de la insulina o fármacos antidiabéticos orales en 200 países y territorios en 21 regiones, analizados por sexo y desde 1980 a 2014. También se calculó la probabilidad posterior de cumplir el objetivo global de la diabetes si las tendencias post-2000continúan.
Los datos obtenidos mostraron que la prevalencia global estandarizada por edad de la diabetes aumentó de 4,3% (IC95% 2,4 a 7,0) en 1980 al 9,0% (IC95% 7,2 a 11,1) en el año 2014 en los varones y del 5,0% (IC95% 2,9 a 7,9) a 7,9% (IC95% 6,4 a 9,7) en las mujeres. El número de adultos con diabetes en el mundo aumentó de 108 millones en 1980 a 422 millones en 2014 (un 28,5% debido al aumento de la prevalencia, el 39,7% debido al crecimiento de la población y el envejecimiento, y el 31,8%, debido a la interacción de estos dos factores). En general, la prevalencia de la diabetes en adultos más baja en 2014 fue en el noroeste de Europa, mientras que la más alta se dio en la Polinesia y la Micronesia, seguido de la Melanesia, el Oriente Medio y el norte de África.
Entre 1980 y 2014 hubo pocos cambios en la prevalencia de diabetes en las mujeres adultas en Europa occidental continental, aunque se apreció un ligero aumento de la incidencia a causa del envejecimiento de la población. Por el contrario, la prevalencia en adultos aumentó en 15 puntos porcentuales en los hombres y las mujeres en la Polinesia y Micronesia. En 2014, Samoa Americana tuvo la más alta prevalencia nacional de diabetes (> 30% en ambos sexos), con datos de prevalencia en adultos superiores al 25% en algunas otras islas de la Polinesia y Micronesia. Si las tendencias post-2000 continúan, la probabilidad de cumplir la meta mundial de detener el aumento de la prevalencia de la diabetes en el año 2025 en el nivel de 2010 en todo el mundo, es inferior al 1% para los hombres y del 1% para las mujeres. Sólo nueve países para los hombres y 29 países para las mujeres, sobre todo en Europa occidental, tienen una probabilidad del 50% o mayor de cumplir el objetivo mundial.