Nº457
Entre las múltiples acciones fisiológicas de la vitamina D se encuentra la regulación del metabolismo óseo, fundamentalmente a través del balance de los niveles séricos de calcio, promoviendo la resorción ósea en caso de deficiencia, su absorción intestinal y la función de la hormona paratiroidea. Por este motivo, está muy extendido el uso de suplementos de vitamina D, especialmente en pacientes ancianos, con el objetivo de reducir el riesgo de osteoporosis y la incidencia de fracturas óseas. Sin embargo, con frecuencia se ha puesto en entredicho la utilidad de estos suplementos.
Un reciente estudio observacional evaluó la incidencia de fracturas a través d