En 2014 se aprobó en España un medicamento consistente en una sola cápsula con tres principios activos (Trinomia®, distintas presentaciones con distintas dosis): ácido acetilsalicílico, el inhibidor de la enzima convertidora de angiotensina ramipril y el inhibidor de la síntesis de colesterol atorvastatina. Su desarrollo se basó en la idea de que, después de sufrir un evento cardiovascular como un infarto de miocardio, es muy común que a los pacientes se les instaure tratamiento con estos tipos de fármacos para el control de la hipertensión y niveles de colesterol y para evitar la agregación plaquetaria y la posible formación de trombos, a fin de prevenir nuevos e