Nº404
El control deficiente de los niveles sanguíneos de lípidos se confirma como un factor de riesgo para la incidencia y la progresión de la retinopatía diabética. Los niveles anormales de todos los tipos de lípidos se asocian con el riesgo de edema macular y la progresión hacia la retinopatía proliferativa.
La diabetes mellitus, en su evolución, afecta a diferentes órganos, entre ellos los ojos. La microangiopatía diabética afecta de manera precoz y específica a la retina. La aparición de la