Nº441
El tratamiento para la prevención de ictus y de muerte en pacientes con fibrilación atrial o auricular no valvular (FANV) se basa en la administración de anticoagulantes orales directos (ACOD) o de antagonistas de la vitamina K (AVK). No obstante, el estrecho margen terapéutico de estos últimos obliga a un control de dosis con cambios posológicos frecuentes, pues, en caso de no alcanzar un control adecuado de la coagulación –establecido por un tiempo en rango terapéutico inferior al 65%–, se ha observado un aumento de complicaciones, como ictus, hemorragia y muerte.
En España, la prevalencia de la FANV se sitúa algo por encima del 4% en mayores de 40 años, llegand