Ampliando la intervención de las farmacias comunitarias, como red de proximidad y como complemento del Sistema Nacional de Salud, es posible reforzar la prestación de servicios sanitarios que respondan a las necesidades de las personas y de los sistemas, en favor de la salud pública, poniendo a las personas en el centro de la toma de decisiones. Esta es la filosofía del ofrecimiento de los farmacéuticos de Portugal para reforzar la asistencia sanitaria con su participación y que se ha concretado mediante las siguientes propuestas hechas públicas por la Asociación Nacional de Farmacias Portuguesas (ANF):

  1. Ampliar la prestación de servicios en las farmacias comunitarias financiadas por el Servicio Nacional de Salud, en las zonas prioritarias.
  2. Implantación del servicio de renovación de la medicación para pacientes crónicos en las farmacias comunitarias.
  3. Implantación y reembolso por el SNS del servicio de vacunación COVID-19 en las farmacias comunitarias y reembolso por el SNS del servicio de vacunación antigripal.
  4. Mayor proximidad en el acceso a los medicamentos hospitalarios a través de la dispensación en las farmacias comunitarias, en base a un modelo sostenible y en todo el territorio.
  5. Revisión de los márgenes de retribución de las farmacias por el servicio de dispensación de medicamentos, con aplicación del criterio de los países de referencia.
  6. Adopción de mecanismos de equidad y cohesión territorial, mediante la definición de incentivos económicos y financieros a las farmacias rurales o en zonas poco pobladas.
  7. Revisión del esquema de incentivos para la dispensación de medicamentos genéricos, promoviendo el aumento de la cuota de mercado de estos medicamentos.