Un estudio reciente publicado en la revista Journal of Antimicrobial Chemotherapy reveló que el 24% de las consultas denominadas test and treat -prueba y tratamiento- del dolor de garganta (STTT por sus siglas en inglés) realizadas en farmacias galesas acabaron con el suministro de antibióticos, frente al 39% de las consultas a médicos de cabecera.
En un plazo de 28 días se suministraron antibióticos en el 28% de los casos de STTT, frente al 40% de los casos de médicos de cabecera.
De esta forma, en la STTT, donde se utilizan pruebas rápidas de detección de antígenos, se redujeron las prescripciones de antibióticos en 15-18 de cada 100 consultas y se ahorraron al menos 69 consultas con el médico de cabecera por cada 100 pacientes.
El estudio destaca el servicio STTT como seguro, rentable y clave para la administración antimicrobiana, proporcionando un modelo para los servicios de farmacia comunitaria. Inglaterra no ha implantado el STTT a escala nacional.